Los proyectos están enmarcados en el Jubileo de la Misericordia, asumiendo las Obras de Misericordia Espirituales y Corporales, alcanzando una cuantía económica que supera los 12000 Euros
El Delegado Diocesano de Misiones, Jesús López Muñoz, detalla que con estos nuevos proyectos “apoyamos el trabajo de misioneros en Perú, que trabajan desde el Evangelio para recordar la dignidad que cada uno de los hombres y mujeres poseen”.
La Delegación
Diocesana de Misiones de Toledo, enmarcados en el Jubileo de la Misericordia,
como desarrollo de las obras de Misericordia espirituales y corporales, acaba
de apoyar económicamente a cuatro nuevos proyectos de desarrollo integral
humano en Perú, en la Diócesis de Lurín y la Prelatura de Moyobamba, con una
cuantía superior a los 12000 Euros.
Proyectos que centran su trabajo en
diferentes aspectos del trabajo que los misioneros desarrollan en Perú, como
son los que desarrollan desde la dignidad humana y la vida infantil, como el
denominado “Casa Vida” en Pachacámac, que acoge a niños a los que se ayuda con
becas escolares, ofreciéndoles sustentos y manutención, recuperándoles de la
más absoluta pobreza. Una Casa Vida en la que se ofrece un proyecto integral
para sus vidas, que requiere de constantes ayudas y apoyos.
También la Delegación Diocesana de
Misiones apoya con una ayuda económica a un proyecto de Evangelización y apoyo
a los animadores parroquiales en Moyobamba, con el objetivo de facilitar medios
para la vida parroquial, al igual que la creación de un huerto, que servirá
para respaldar las necesidades de un comedor abierto a familias con necesidades
imperiosas de ayuda alimenticia.
De igual manera la Delegación de Misiones contribuye con el proyecto
“Implementación de cocinas mejoradas para pobladores de zona rurales en San
José de Sisa”. Con este proyecto se logrará implementar cocinas mejoradas a 22
familias de la zona rural en condiciones de pobreza. De este modo salvarán el
peligro de volcamientos y quemaduras, mejorando el soporte precario e inseguro
para cocinar.
Estos proyectos están desarrollados en la Prelatura de Moyobamba por
los misioneros diocesanos de Toledo, Padre José Fernando Cerro Játiva y Padre
Jaime Ruíz del Castillo. También se contribuye con la Diócesis de Lurín, con la
Casa Vida, impulsada por el misionero Padre Eugenio García, con la que la
Delegación de Misiones mantiene una colaboración estrecha desde la hermandad de
ambas Diócesis.
El Delegado Diocesano de Misiones, Jesús López Muñoz, detalla que con
estos nuevos proyectos “apoyamos el trabajo de misioneros en Perú, que trabajan
desde el Evangelio para recordar la dignidad que cada uno de los hombres y
mujeres poseen”.